El debut de Sonic en el Mundo Abierto tendrá más en común con Dark Souls y Xenoblade Chronicles de lo que pensamos.
Cada vez que se anuncia un nuevo juego de Sonic en 3D saltan las alarmas en la comunidad, ya que en poco más de 20 años han sido contados los títulos que se acercan a lo conseguido por los Sonic Adventure. En Sonic Team no se conforman con igualar a los títulos del Dreamcast y sus ports, así que con Sonic Frontiers decidieron subir la apuesta; tanto, que de acuerdo a ellos mismos Frontiers nos la pondrá tan difícil con algunos jefes que juntar las 7 Chaos Emeralds va a ser algo muy necesario.
Como los fans saben, estas gemas tan importantes en el universo del erizo le permiten convertirse en Super Sonic casi siempre para la pelea final, pero en el Mundo Abierto necesitaremos esta forma en más de una ocasión según refiere Norio Kishimoto, director del juego:
“Normalmente en juegos de Sonic encuentras un jefe y luchas con él como el erizo azul normal. En Sonic Frontiers habrá algunos que Sonic no podrá siquiera rasguñar, pero si consigues las 7 Chaos Emeralds puede transformarse en Super Sonic y enfrentarse a ellos. La transformación será la única forma de hacerlo.”
Kishimoto hace especial énfasis en la batalla final ya que hasta ahora no había sido necesaria la transformación de Super Sonic fuera de esta, dándonos una idea del buff de dificultad que tendrá el juego respecto de toda la saga, que al ser de Mundo Abierto podemos imaginar que habrá que dar varias vueltas en busca de las esmeraldas antes de enfrentar a uno de estos jefes nivel Dark Souls.
Sonic Frontiers sale a la venta el próximo 8 de noviembre en PC, PlayStation, Xbox y Nintendo Switch.